En Cataluña se quiere prohibir circular a los camiones de más de 12 toneladas por la N-II hasta la frontera con Francia, en total unos 100 kilométros de carratereas de Girona, una medida que para la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer) sólo busca el beneficio de Abertis, la empresa concesionaria de autopistas, que recaudará 12 millones de euros por los más de 3000 transportistas que diariamente serán obligados a circular por la autopista AP7.

La Federación de Transportistas valora la decisión del gobierno catalán “como una medida sin precedentes tanto en España como en el resto de Europa” por cuanto nunca con anterioridad se había prohibido la circulación de vehículos de transporte en una carretera de ámbito nacional en un trayecto de casi 100 kilómetros, más aún teniendo en cuenta el carácter estratégico de dicha vía al conectar el tráfico natural tanto mercancías como viajeros de todo el Mediterráneo español y el centro de la península con el resto de Europa.

Desde Fenadismer piden tanto al Ministerio de Fomento como a la Generalitat de Cataluña que reconsideren esta medida prohibitiva y en su lugar establezcan medidas económicas incentivadoras dirigidas al colectivo de transportistas estableciendo la gratuidad del peaje de la autopista AP-7 en los tramos paralelos con mayor densidad de circulación de la N-II, y de una rebaja sustancial del peaje en el resto de tramos de la autopista paralelos a la citada carretera nacional.