Si te quieres dedicar al transporte público por carretera o a sus actividades auxiliares y complementarias (agencias, distribuidores, almacenistas y transitorios) deberás obtener primero el título administrativo de capacitación profesional. Independientemente del transporte público que se vaya a realizar, ya sea transporte nacional o internacional o de mercancías o personas se necesita estar en posesión de esta capacitación profesional.

La capacitación de transportista concretamente es un título o certificado administrativo expedido por las diferentes Comunidades Autónomas y para obtenerla  es necesario superar dos pruebas:

  • Primera Prueba: consiste en un examen teórico tipo test compuesto por 100 preguntas, y en cada una de las ellas hay cuatro posibles respuestas.
  • Segunda Prueba: consiste en 6 supuestos prácticos en los que el aspirante tendrá que poner en práctica sus conocimientos.

Más adelante iremos profundizando en cada una de las pruebas y en las temáticas que necesitas dominar para superar cada una de ellas.